
BH"C
Mi pajarito Chicky me lo encontré en la boca del gato de mi prima. Mi madre escuchaba “¡Pio, pío, pío!” y fue a mirar en el garaje y vio que se estaba comiendo un pajarito. Fue cuando mi madre lo salvó. A mí me gustó ponerle Chicky porque, de tanto llamarlo así, se acostumbró. Pero un día, al volver yo de la escuela, me dice mi madre que no estaba mi pajarito. Cuando me lo dijo, me quedé “pillada” y me pasé todo el día llorando, porque un pajarito como él no hay ninguno.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Deja aquí una opinión, un comentario